“AbRiGo es producto de la crisis de los inicios del 2000. Nació en la búsqueda de encontrar algunas respuestas en medio de la crisis económica e institucional. Le presenté el proyecto a quien era el coordinador y creador de la carrera de Artes Electrónicas de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, donde había comenzado a dar clases, y él me dijo que tenía que presentarme a la convocatoria de un subsidio que da la secretaría de Políticas Universitarias del ministerio de Educación, porque el proyecto era muy interesante pero implicaba un gran despliegue. Así que me presenté y arrancamos el 15 de agosto del 2007”, comenzó, en diálogo con El Portal de las Universidades, la fundadora y directora del Programa, Andrea Varela.
En aquel momento, la idea inicial fue trabajar con “la brecha digital que existía entre nuestros abuelos y los veinteañeros. Me interesaba pensar en que se podía generar un proyecto que uniera a esas dos generaciones. Y, sobre todo, pensar a la tecnología desde el lado b, no solo desde el lugar que todo es producción, adelanto y avance, y siempre ocurre en el futuro, sino como el producto de una larga tradición de distintas continuidades y rupturas”, explicó.
De esa manera, “AbRiGo se ocupa de este entramado que hay entre la producción del hombre y la naturaleza. De tomar consciencia y hacer algo, en un momento que venimos descubriendo que es muy crítico a nivel ambiental. Empezamos a trabajar en todas estas cosas hace más de 15 años, y hoy seguimos trabajando con los talleres, para llegar tanto a jóvenes como adultes, para transmitir estas técnicas de reutilización, que también tienen que ver con generar y gestionar en comunidad con consciencia del ambiente. Además, estamos atentos a reformular lo que sea necesario para seguir trabajando, porque realizamos muchas actividades”, afirmó.
Producción, reciclado e investigación
Entre las muchas propuestas que dicho Programa de la UNTREF impulsa, se encuentran: una campaña solidaria, “Todos Somos ABRIGO”; un taller abierto a la comunidad, “Taller de investigación en tecnologías del tejido”; un emprendimiento social, “20 Yeguas”; un espacio de investigación artística, “Manifiesto”; un proyecto de investigación académico, “Texto, tejido y contexto”; y un programa de reutilización de descartes industriales y tecnológicos, “Magnetismo”. “Tiene muchas aristas el Programa y, a su vez, está todo entramado”, sostuvo.
Además, “desde que empecé con AbRiGo fui formando un equipo de trabajo con gente de la UNTREF y de la comunidad, que se fue acercando y se quedó con nosotros”: Natalia Pajariño, Patricia Sáenz, Yanina Viegas Mendonça, Bernardo Piñero, Facundo Suárez y Maximiliano Bearzi.
Para finalizar, la directora del proyecto se refirió a la respuesta que reciben las ideas que AbRiGo impulsa y dijo: “siempre ha sido muy buena porque son espacios que se piden y respetan mucho. Cuando transmitís conocimientos pensados para que sean realmente útiles para la vida, la gente lo agradece. Hacen cosas increíbles. Me gustaría poder seguir llegando a más personas con nuestras propuestas”.
Para obtener mayor información sobre el Programa Abrigo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, las y los interesados pueden enviar un correo a programabrigo@untref.edu.ar, o visitar la página web del proyecto.
