“Se trata de un proyecto de Extensión que debido a la pandemia se limitó al principio, en cuanto a diferentes tipos de servicios que buscábamos encarar. La incubación es uno de los ejes principales y la búsqueda de ideas en marcha, que tengan un impacto social y la innovación entre sus características, está limitada a la zona Atlántica”, comenzó, en diálogo con El Portal de las Universidades, el director del Programa Incubadora de Proyectos Curza, Gabriel Carusso.
Con el objetivo de impulsar diversas convocatorias a iniciativas de negocios, de las cuales se conformarán los equipos emprendedores que, luego de un proceso de selección, pasarán a integrar las etapas de Pre Incubación e Incubación de Proyectos, “la ayuda consiste en asistencia, actividades de capacitación, orientación, en la elaboración de un plan de negocios, y también contemplamos la asistencia financiera a través de organismos del Estado provincial y nacional”, explicó.
Respecto a las motivaciones, el también docente de la licenciatura en Gestión de Empresas Agropecuarias de Curza, dijo: “Notamos, por ejemplo, que una tesis queda en un planteo teórico y quizás nunca se materializa. Eso fue un disparador para asistir a ese tipo de proyectos, por eso nos interesa el perfil de estudiantes avanzados, o graduados, o gente vinculada a la Universidad; que cumplan con ese requisito de que sus ideas sean disruptivas, en lo que se refiere a innovación, un aspectos tecnológico, a servicios o a la producción, entre otros”.
Contribuir a la creación y desarrollo de emprendimientos
“El planteo surgió en la época de pandemia. El proyecto fue presentado por un docente que falleció, Daniel Welschinger. Luego hubo un reemplazo, se revieron algunas cuestiones, y se sumaron y se fueron algunos integrantes. Ahora estamos con este eje de trabajo que es la incubación de algunos proyectos de interés, que tengan potencial y puedan ser materializados en un año aproximadamente”, sostuvo.
Junto al equipo conformado por la técnica, Fernanda Leal; licenciado, Nicolás Elosegui; licenciado, Marcos Tabares Bouix; contador, Guillermo Jocano; técnico, Emanuel Vela; licenciada, Marina Favalli; y, Lorena Recondo, la idea es brindar apoyo y asistencia, durante sus primeras etapas de vida, a emprendimientos de impacto social e innovadores de base tecnológica e industrial.
Si bien esta primera convocatoria finalizó el pasado miércoles 29 de junio, “el proyecto va a tener otras. Calculamos dos veces por año, para ir alimentando los diferentes estadios: los que se presentan para una pre incubación, que sería el caso de este llamado, y después vamos a tener otra, donde los de este primer grupo ya estarán en periodo de incubación”, aclaró.
“La idea es que se vayan renovando los proyectos y circulen adentro de la incubadora. Esperamos, además, que se puedan materializar varios de ellos. Contamos con la participación de una agencia de desarrollo económico, en Río Negro, que también va a colaborar con la parte de un lugar físico, y la Cámara de Comercio, Industria y Producción de Viedma, que nos comprometió un espacio para dar charlas y asistir”, finalizó.
Cabe destacar que las convocatoria representan una estrategia esencial para la vinculación de la Universidad con los diferentes actores del sistema educativo, social, científico tecnológico, el sector del conocimiento y el entramado productivo, que impulsan el desarrollo de capacidades empresariales en la comunidad y contribuyen al desarrollo económico territorial. Más información en este enlace.